El seguimiento ambiental de las obras permite evitar impactos al entorno de las obras no previstos anteriormente, y garantizar que se ha cumplido con la legislación ambiental vigente y se han puesto en marcha las medidas preventivas y correctoras de impacto ambiental incluidas en el proyecto, y exigidas por el órgano ambiental competente.
El seguimiento y vigilancia ambiental de obras es obligatorio para aquellos proyectos que estén obligados a pasar el trámite de Evaluación de Impacto Ambiental. No obstante son muchos los promotores o contratistas que optan por realizar labores de seguimiento de todas sus obras, ya que con ello se afianza el compromiso de la empresa con la protección del medio ambiente, se mejora la relación con el órgano ambiental, y se evitan posibles incumplimientos de la legislación ambiental que puedan derivar en sanciones.
La coordinación ambiental de obras se encarga de ejecutar el Plan de Vigilancia Ambiental de la obra, controla que se cumplan los condicionantes impuestos en la Declaración de Impacto Ambiental, y las medidas preventivas y correctoras del Estudio de Impacto Ambiental.
Mediante el seguimiento ambiental se efectúan controles periódicos del estado de los factores ambientales tales como atmósfera, agua, suelo, gestión de residuos, erosión, fauna, vegetación o medio socioeconómico tanto en fase de ejecución de obra, como de explotación de las instalaciones. Asimismo efectuamos una labor de asesoría ambiental a la Dirección de obra, efectuando recomendaciones sobre el modo de ejecución de medidas ambientales de los proyectos, las autorizaciones a solicitar previo a la ejecución, o cuando se produce una modificación del proyecto durante la ejecución.
El seguimiento ambiental de obras incluye la redacción de informes ambientales, bien de tipo periódico para informar sobre la marcha de las obras y el cumplimiento del Plan de Vigilancia Ambiental, o extraordinarios para informar sobre la afección a determinado factor o la ejecución de determinadas medidas ambientales, como por ejemplo hidrosiembras o plantaciones.
El Plan de Vigilancia Ambiental es el documento en el que se plasma los controles a efectuar en fase de obras o de explotación para detectar y evitar impactos sobre los factores del medio ambiente. Redactamos Planes de Vigilancia Ambiental a incluir en fase de proyecto durante la tramitación de la Evaluación de Impacto Ambiental o antes del inicio de la obra, en aquellos casos que no estuviese previamente definido con suficiente detalle. El Plan de Vigilancia Ambiental de obras se puede incluir en ofertas a Licitación pública, bien por exigencia de los pliegos, bien para su propuesta como mejora de la ejecución de las obras.
Los objetivos que se marcan en la Ley, para la Vigilancia ambiental durante la fase de obras son:
– Detectar y corregir desviaciones, con relevancia ambiental, respecto a lo proyectado en el proyecto de construcción.
– Supervisar la correcta ejecución de las medidas ambientales.
– Determinar la necesidad de suprimir, modificar o introducir nuevas medidas.
– Hacer un seguimiento de la evolución de los elementos ambientales relevantes.
– Ser de utilidad para futuros estudios de impacto ambiental.
En INGUBIDE estamos especializados en la realización de Vigilancias ambientales, y en la redacción de Planes de Vigilancia Ambiental, por lo que si necesitan este tipo de servicios, no duden en contactar con nosotros.